¡Nunca más un periodista más...!

 

 

• México tiene la forma de un cuerno de la abundancia

 

 

Trabajo peligroso él, del periodista, sea cual sea su faceta de este, quizás pero uno de los mejores oficios que hay porque nos permite ser testigos y cronistas de la historia misma y debemos de informar tal cual los hechos sin subjetividad, imponiendo objetividad a costa de lo que sea, por encima de lo que suceda. Además de que hoy en día es más peligroso un periodista que un terrorista islámico...

 

¡Nunca más un periodista más, ni un ciudadano más, ni un niño, joven, mujer u hombre sea su condición económica, y social la que sea debe de vivir bajo miedo, incertidumbre por el día al día que se vive en México, ante la ola de violencia desatada por la crisis de inseguridad que desde hacer algún tiempo se vive y se percibe a lo largo y ancho de la nación!

 

 

 

 

Todos los días muere gente inocente o no inocente, daños colaterales como suelen llámales los especialistas en seguridad, pero ya basta de tanta laxidad. México tiene la forma de un cuerno de la abundancia, riqueza material, intelectual y su gente que hacer en si la gran diferencia, si uno mira un mapa del país podrá constatar que el país esta divido entre riqueza y pobreza, al norte la riqueza pero en algunos casos la pobreza misma, lo mismo sucede al sur pero en el día a día hay un común denominador en todas las regiones del país, la violencia desatada por el crimen organizado, bandas del narcotráfico peleando por territorios y por derechos de piso a diversos sectores como los agricultores y comerciantes en general.

 

Muertes misteriosas de ciudadanos, desapariciones de jóvenes, robo de infantes, y todo lo que se nos pueda ocurrir que ante contra la tranquilidad de los mexicanos. La realidad es otra en el discurso político de las autoridades sean federales, estatales o municipales, a diferencia de la realidad que vive el ciudadano común.

 

¡Ya basta! de tantas muertes y zozobra que se vive, basta de desapariciones misteriosas y explicaciones endebles sobre periodistas en general a lo largo y ancho del país, de móviles poco creíbles sobre lo acontecido sobre los mismos. Como es el caso de Gregorio Jiménez de la Cruz, reportero de la fuente policiaca de los periódicos Notisur y Liberal del sur, quien fuera encontrado muerto en una casa de seguridad en el municipio de Las Choapas, Veracruz, en donde sus victimarios inhumaron su cuerpo en una fosa clandestina, localizada por fuerzas militares y de la Secretaría de Seguridad Pública; durante lo que va del sexenio de Javier Duarte, 15 periodistas asesinados.

 

 

 

 

Cuantas más sangre se necesita para que ya nunca más sucedan historias trágicas en este el México bronco que por momentos parece estar dormido, aletargado en un sueño profundo pero que despierta de forma violenta, recordándonos la cruda realidad del México de las justas demandas, del México de las carecías y  del México de las grandes esperanzas anheladas. Al tiempo...